¡Hola exploradores! No todo en fotografía es amanecer o atardecer, otro gran momento que debes conocer es la hora azul: el momento mágico en fotografía. Seguramente te hayas preguntado ¿Cómo hacer fotos durante la hora azul? ¿Cómo sacarle partido a la hora azul?
La luz en una fotografía lo es todo. Sin duda es el punto clave que hará que una imagen de buena a excelente. O pase a esa carpeta en el ordenador del olvido… Porque no es lo mismo la luz dura que tenemos al mediodía en pleno julio que la que tenemos una tarde de noviembre. Cada momento tiene sus particularidades. Hay que saber aprovecharlas para convertir nuestra foto en esa fotaza 10 para tus redes sociales.
Pues bien, la hora azul es uno de esos momentos mágicos del día. Y lo más seguro que es un término del que ya habías oído hablar antes, ya que también está unido a otro término “la hora dorada”. Te damos algunos consejos para tus fotografías de viajes. Vamos allá exploradores.
Índice
La hora azul en fotografía
¿Qué es la hora azul en fotografía?
También es conocida como L’Heure Bleue nombre original originario del francés. Es el momento anterior a la salida del sol o el posterior al atardecer hasta la noche completa. Durante el atardecer el sol se va acercando al horizonte y su luz se vuelve cada vez más y más cálida, ya que los rayos de luz atraviesan de diferente manera la atmósfera. Por eso se producen esos colores tan intensos que nos hacen quedarnos embobados.
Aunque antes del amanecer se produce, su efecto realmente fuerte es después de ponerse el sol. Por diferentes motivos, como las mejores condiciones climáticas, de visibilidad o la iluminación de las ciudades.
Durante la hora azul en fotografía la luz cambia de manera drástica. Pasa de tonos cálidos a un fuerte azul, un azul realmente característico. Es justo cuando nos encontramos en el cielo esos degradados de azul a naranja, que con el paso de los minutos se van volviendo cada vez más azulados.
La luz en este momento se vuelve muy suave, sin sombras y lo envuelven todo de una manera muy sugerente. Lo mejor de todo es durante la hora azul es que tenemos bastante tiempo para practicar diferentes encuadres y valores de exposición. Y al día siguiente se vuelve a repetir. ¡Siempre hay que practicar exploradores! ?
Aquí, por ejemplo te dejo unas fotografías durante los viajes a la maravillosa Budapest y su parlamento, Bratislava y el Danubio, o Cracovia y su imponente castillo durante esa famosa hora azul. Como veis siempre aprovecho este momento para obtener fotos definitivas para el blog. Las fotos son más definidas y claras que durante el atardecer, donde el color tiene más protagonismo en detrimento del motivo.
Aprovecha para callejear por la ciudad
Durante la hora azul en fotografía la luz se vuelve muy suave y lo envuelve todo. Además es justo el momento en el que se encienden las farolas de la calle y la luz de los edificios. Así que se produce una mezcla de color espectacular, el azul del cielo con los tonos aún naranjas por el atardecer y la iluminación inicial de las grandes urbes.
La hora azul es el momento clave para fotografiar una ciudad. Gracias a ella obtenemos una imagen mucho más rica en detalles. Si hacemos una fotografía totalmente de noche, obtenemos es una foto con el cielo negro sin detalles de nubes. Y también un mayor contraste ya que hemos perdido esa luz difusa que lo ilumina todo.
Hay que tener en cuenta algo muy importante. Cada minuto cuenta. Durante la hora azul cada minuto que pasa vamos perdiendo luz, encaminándonos hacia la noche profunda. Los resultados van empeorando poco a poco, hasta que la escena se vuelve muy contrastada. ¡Y no queda otra que esperar al día siguiente!
También puedes aprovechar este momento para pasear por las calles y obtener fotografías impresionantes. Aunque la luz es baja y necesitarás objetivos más luminosos y caros, las fotografías tendrán un plus que a plena luz del día.
Aquí te dejo otras dos fotos, de la Plaza de Brujas en Navidad y del Tower Brindge de Londres. Espero que te gusten =)
¿Cómo aprovechar las últimas luces del día?
Cuando estamos fuera de la ciudad nos es mucho más fácil encontrar el horizonte y distinguir los degradados de colores en el cielo, sobre todo si tenemos nubes. A diferencia de las ciudades no hay iluminación extra de farolas o edificios. El paisaje se va volviendo cada vez más oscuro hasta llegar al negro profundo.
Lo primero es buscar elementos que llamen la atención:
1. El cielo es un actor de la escena, pero no lo conviertas en protagonista –o no siempre al menos–.
2. Es importante que añadas otros elementos que añadan interés. Por ejemplo, busca un árbol que añada distancia al horizonte, la hierba del suelo o algunas rocas –como la fotografía de Cracovia o la cascada de Godafoss en Islandia del final–.
3. Integra elementos en diferentes planos y velocidades. Por ejemplo un río en larga exposición y edificios. O una calle con personas moviéndose como en Brujas.
Porque como hemos dicho la hora azul se va apagando poco a poco en el atardecer. Por eso es muy interesante crear siluetas contra el fondo del cielo. Ese árbol que hemos dicho aparecerá negro contra un cielo de color azul anaranjado. Dale detalles a la foto, para que no se quede en un mero atardecer sin más.
¿Has visto la diferencia entre estas dos fotografías de la hora azul de Toledo? Una con las últimas luces y las calles iluminadas y otra en la noche ya bastante avanzada. ¿Cuál te gusta más? A mí, la primera 🙂
¿Cómo hacer fotos durante la hora azul?
- Lo primero y casi indispensable, hay que utilizar un trípode. Yo siempre viajo con un trípode pequeño de viaje. Pero uno es totalmente necesario, ya que vamos a trabajar con velocidades de exposición largas.
- Por otra parte, necesitamos un cable disparador. Con el cable disparador evitamos el movimiento de la mano pulsando el disparador y del espejo, porque te va a salir mal seguro.
- También podemos trabajar con el temporizador de nuestra cámara, poniendo entre 5 y 10 segundos como mínimo. Incluso algunas marcas tienen sus propias apps para controlar inalámbricamente nuestra cámara.
- Dispara siempre en RAW. Así conseguimos el máximo detalle en información de nuestro sensor. Ya que un JPG comprime las fotos y hay cosas que luego no podremos casi arreglar, como es el balance de blancos o la exposición.
- El ISO de tu cámara ponlo lo más bajo posible. Así evitamos el ruido en las imágenes, ya que lo normal es que cuando retoquemos querremos sacar algo de información de la zona de las sombras. Si disparamos con ISOs muy altos el ruido se hará muy visible y arruinará la fotografía, así como los colores o el contraste.
- Si queremos ganar tiempo entre foto y foto, podemos quitar la opción de cámara de reducción de ruido de fotografías de larga exposición. Es más sencillo eliminar el ruido con el programa para procesar los RAW y ahorrarás tiempo.
- Seguramente tendrás que utilizar filtros especiales para poder realizar las fotos de larga exposición, algún polarizador o incluso los filtros estrella para las farolas. Te contamos todo en este post sobre filtros.
Y lo mejor de la hora azul: disfrutar 😉
Finalmente recordarte que tienes dos momentos a lo largo de día. Aunque prioriza antes de la noche, es más potente. Aunque durante el amanecer también se produce ese momento mágico, aunque siempre he tenido la percepción de que es más corto. Quizás es más útil para paisajes y naturaleza. Para ciudad siempre antes de la noche, por la mañana no quedará nada encendido y no habra vida.
Durante la mañana partimos de un cielo totalmente oscuro, la noche profunda. Y poco a poco empieza a clarear hasta que el primer rayo de sol asoma. Eso sí, disfrutarás del amanecer, uno de los momentos más bonitos del día, así que tendrás un 2×1.
La hora azul en fotografía es un momento mágico que debes aprovechar durante tus viajes para sacar momentos únicos. Los colores se vuelven más intensos y se forman degradados de colores en el cielo casi imposibles. Aprovecha todo lo que puedas para practicar y ese fotón llegará. ¡Hasta otra exploradores! ¡Y mencionanos en tus fotos de la hora azul por las redes sociales! Así podremos comentarte. ?